20200715

Segunda parte del Diario de un Confinado en Olavide. AGARIMO. Ángel Alda

Ventana de Rinlo

AGARIMO

Miércoles 15 de julio

Por fin. Esta noche termina el confinamiento en la comarca de la Mariña. Mañana tendremos la ocasión de estar con la familia y los amigos del otro lado de la Ría. Y podremos ver chapotear en la arena y en el agua de Arnao a nuestra Manolita.

Esta noche lo celebraremos en casa con unos percebes comprados esta misma mañana en la cetárea de Rinlo. Percebes de San Cosme que por aquí los percebeiros todavía no bajan a la marea. Y con una botella de Godello del pueblo de mi amigo Xavier, el Barco de Valdeorras.

Y el viernes a Oviedo. Ya saben aquello de quién va a Santiago y no al Salvador.

Esa es la novedad. La gente de Ribadeo ha aguantado bien estos días en los que tanta confianza tenían depositada. Es muy duro pasar por lo que ha pasado por ejemplo mi amiga Pepa de la Cortiña con anulaciones de las reservas que tenía ya contratadas en su hotel rural. La gente ha cambiado sus destinos y han marchado para Asturias o para las rías baixas. Esos ya no volverán. Pero ustedes si. Por favor vengan a la Mariña. Descubran un territorio amistoso y a unas gentes cariñosas y trabajadoras. Unas playas vírgenes. Un cielo y un mar con todas las gamas del azul y del verde. Montes, valles y arroyos deliciosos. Y la mejor dieta del mundo. Caminos para recorrer a pie o en bici. Y un clima imposible de mejorar, incluyendo las dosis de bruma y lluvia que un viaje romántico exige.

Y aprenderán palabras maravillosas como vagalume, enxebre, brétema, xeito, luar y tantas otras.

Vengan. Es una orden. Con mascarilla y gel hidro alcohólico. Pero vengan.

Esta misión de contar mi segundo confinamiento ha terminado. Ha sido un placer.

Con moito agarimo

Ángel

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