Publicado o domingo 4 de febreiro de 2007 no blog de José María:
EL TOPÓNIMO 'GROBAS'
Grobas es el nombre por el que,
desde tiempos inmemoriales, se conoce al más famoso e importante
castro celta que albergan las tierras de Ribadeo y, quizás, el tiempo
nos lo dirá, uno de los más importantes de la provincia. En esa
dirección apuntan, al menos, las señales externas de su superficie,
todavía sin recuperar. Signos de su gran importancia son, sin duda,
tanto su extensión, de aproximadamente treinta mil metros cuadrados,
como las grandes defensas de protección que lo rodean, formadas por
tres profundos fosos, excavados en roca, con sus altas murallas. Su
proximidad a la villa de Ribadeo y su fácil acceso, así como la
espectacular belleza de su paisaje lo convierten en un objetivo de
primer orden a recuperar, mediante las correspondientes excavaciones
arqueológicas. En su subsuelo permanecen, sin duda, celosamente
conservadas, las huellas de nuestros antepasados celtas que
deambulaban por estas tierras que hoy nos acogen a nosotros. Estamos,
pues, ante un elemento de primer orden, tanto por su valor científico
y cultural, como turístico, al que las administraciones públicas
deben prestar atención.
Pero, ¿de dónde le viene su nombre? ¿Por qué se llama As Grobas?
Nos encontramos ante una palabra
de origen indoeuropeo que, a través de las lenguas germúnicas, en
donde esta palabra dejó marcadas sus huellas, llegó a nuestras
tierras de la mano de los suevos invasores, allá por el siglo V.
Estamos ante un raro ejemplo de los pocos casos de nombres comunes
que este pueblo dejó entre nosotros, en contraste con la abundante
herencia de nombres propios que nos legaron y que aún perduran en
nuestros días.
De su huella en las lenguas germúnicas dan
testimonio palabras como groove 'canal' en inglés, o graben 'zanja' y
grube 'excavación' en alemán. En todas ellas, como se ve, se encierra
siempre la idea de 'foso', 'hoyo'.
En nuestro idioma gallego
dejó su impronta esta palabra germánica bajo la forma de groba para
referirse con ella a un lugar estrecho y profundo que aparece en un
terreno. En Portugal, en el concejo de Amares, cerca de Braga, hay
también un castro celta en excavación que recibe el nombre de
Grovos. La adecuación semántica de esta palabra a las características
del terreno, en el caso de ambos castros, con sus profundos fosos y
sus murallas, es evidente.
Esta palabra no permanece viva
actualmente en nuestro idioma como palabra común, sino que se
presenta fosilizada. Y así existen unos quince lugares y algún río en
Galicia que llevan este nombre, en su forma ya fosilizada, como es el
caso de este castro.
1 comentario:
Muchas gracias
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