Visión de José María do conflito sobre a ría e o seu nome inducido por cuestións políticas, seguido da pretendida daquela construción dunha macronave en Mirasol, ó tempo que, entre outras cousas, lembra algo incumprido, a constitución dunha comisión de coordinación para a xestión da ría.
Sábado, 07 de junio de 2008
LA RÍA DE RIBADEO
• Publicado por jmrd_ribadeo a las 9:47
La Ría de Ribadeo sigue estando de máxima actualidad. Esta joya, compartida por gallegos y asturianos, se está convirtiendo en la noticia estrella de los comentarios y reclamaciones de la gente de esta comarca, tanto gallega como asturiana.
Nuestros vecinos, los asturianos, no conformes con el fallo del Consejo Superior Geográfico que la define como Ría de Ribadeo, vuelven a la carga reclamando otra denominación para la ría, mientras acusan a los gallegos de conquistadores y expansionistas. Y lo hacen a través del Parlamento de Asturias que estos días pasados admitió a trámite una proposición no de ley para reclamar ante el Ministerio de Fomento el cambio del nombre oficial de la “Ría de Ribadeo”, asignado por el citado Consejo. Es así como, un elemento integrador como la ría, llamada a unir en una a las comunidades humanas que se asientan en sus orillas, que comparten la misma lengua, la misma forma de vida e idiosincrasia, se está convirtiendo, por las ambiciones políticas de algunos, en elemento de desunión y separación entre ambas comunidades.
Y por si esto no fuera bastante, se introduce un nuevo elemento de confrontación entre los políticos de las dos autonomías. Se trata de la famosa nave gigante que Portos de Galicia pretende cimentar y levantar en el puerto de Ribadeo. Y digo “cimentar y levantar”, porque no se trata de una simple nave flotante como equivocadamente se le viene denominando en los mensajes asturianos, ni de una nave cualquiera pues su altura sobresale desde el muelle más de 36 metros, según nos enteramos ahora por la Consejera de Medio Ambiente del Principado, lo que equivaldría a un edificio de doce plantas.
El conflicto entre las dos comunidades está, pues, servido. La consejera de Medio Ambiente del Principado acusa a la Xunta de información equívoca y engañosa sobre la instalación de esta nave. Y reclama la creación de algo que se había acordado en las cumbres ínter autonómicas y que ya debía de estar funcionando: Una Comisión de Coordinación para la gestión de la ría de Ribadeo, como elemento de cohesión social, territorial y económico entre las dos comunidades, que ponga en marcha los acuerdos alcanzados en las cumbres inter autonómicas.
Y en Galicia, mientras tanto, ignorando la posición del concejo de Ribadeo en pleno y la unánime opinión del pueblo, la conselleira de la Xunta, Sra. Caride, se manifiesta a favor de este proyecto como algo muy positivo, para los intereses de CEASA. Y lo que aún es más sorprendente en las declaraciones de esta conselleira, que hasta ahora se había distinguido por su encarnizada defensa del medio ambiente y de los 500 metros del litoral, es que dice que esta nave no tendrá ningún efecto medioambiental en la ría, mientras que al mismo tiempo afirma, eso sí, que tendría un impacto estético muy importante. ¿Qué entiende, entonces, la Sra. Caride por impacto medioambiental? ¿No es medioambiental, acaso, el impacto que su cimentación en las aguas de la ría va a suponer en el movimiento de sus corrientes marítimas, así como en la nueva fisonomía de sus tesones y en el paisaje? ¿No es, acaso, medioambiental el grave impacto paisajístico que va a producir en el casco histórico de la villa de Ribadeo y en la ría?
Pero no acaban ahí las incongruencias verbales de esta conselleira. Como justificación y autodefensa de sus posiciones acusa al Gobierno del Principado nada menos que de autorizar las obras de ampliación de los Astilleros Gondán y los rellenos efectuados en el lado asturiano de la ría, sin que la Xunta llegara a ponerles reparos. Un grave desconocimiento de la realidad en una desafortunada justificación de su postura, pues, con ella la conselleira parece desconocer la realidad de la orilla asturiana de esta ría, que, al contrario que la orilla gallega, en la que proliferaron los rellenos, las escolleras y las naves, permanece cuidadosamente respetada hasta el presente.
La polémica no ha hecho más que empezar. La ría de Ribadeo, pasto de los intereses económicos de empresas privadas y de la falta de cuidado y apatía de nuestros políticos y gobernantes, va a seguir estando de actualidad mientras exista. Eso sí, seguirá siendo utilizada como disculpa para los brindis oficiales de los políticos, como se hizo hasta el presente. Menos mal que esta vez los vecinos de ambas orillas se unen en su defensa. Pues si no se le pone freno a estas actitudes estará destinada a acabar convertida en un río cenagoso como el Nervión.-
Ningún comentario:
Publicar un comentario